domingo, 30 de septiembre de 2012

El sabueso de los Baskerville, de Arthur Conan Doyle





El sabueso de los Baskerville
de Arthur Conan Doyle

Jesús Guerra

Luego de leer la estupenda novela La casa de la seda, de Anthony Horowitz, la más reciente novela de Sherlock Holmes, con el visto bueno de los herederos de Conan Doyle, lo más lógico es que a uno le den ganas de leer o releer una de las novelas del canon de Holmes (formado por cuatro novelas y 56 cuentos escritos por el creador de Holmes y Watson, sir Arthur Conan Doyle), y eso fue lo que hice, releí El sabueso de los Baskerville, que es quizá la más famosa de las cuatro novelas de Holmes, tal vez porque el misterio comienza desde la primera página, la tensión está muy bien administrada, y es, de las obras originales, la única que mezcla el género policiaco con el de terror.

Es claro que comparadas con las novelas policiacas de nuestros días, las novelas de Sherlock Holmes, vistas desde la perspectiva actual, son obras muy inocentes, no en el fondo pero sí en la superficie. Esto lo pone en evidencia La casa de la seda, novela que sigue a la perfección el tono de las originales pero nos narra un caso criminal mucho más terrible que cualquiera de las novelas del canon, y esto está relacionado, evidentemente, a lo que hace un siglo estaba permitido publicar, y a lo que se consideraba de buen gusto en Inglaterra, que no tenía nada que ver con la realidad, pues por los mismos años en que Conan Doyle comenzó a publicar sus novelas de Sherlock Holmes se produjeron en Londres los crímenes de Jack el Destripador.

El doctor Mortimer, de Devonshire, va a la casa de Sherlock Holmes, en el 221B de Baker Street, a contarle una historia y a pedirle un consejo, pues para este momento Sherlock Holmes es un hombre conocido en todo el país gracias a las historias publicadas por el doctor Watson. La historia es una leyenda, la del sabueso de los Baskerville, según la cual un perro fantasma merodea el páramo que se encuentra junto a la mansión de la familia Baskerville y en algún momento matará, se deduce, a cada uno de los herederos de esta muy adinerada familia. Según la leyenda, este enorme perro infernal apareció en el páramo de la mansión, llamada Baskerville Hall, para castigar con el terror y la muerte a un malvado antecesor, llamado Hugo, del actual dueño de la casa, Sir Charles Baskerville. Y aunque el carácter y el comportamiento de Sir Charles son los opuestos a los de su criminal pariente, Sir Charles, que era un anciano, tenía pavor de dicha leyenda y, pocos días antes de la visita del doctor Mortimer a Sherlock Holmes, fue encontrado muerto en el exterior de la mansión, justo en la puerta del jardín que da al páramo, y lo único extraño que el doctor Mortimer encontró fueron huellas de un gran perro cercanas al cadáver. El consejo está relacionado con la llegada desde los Estados Unidos del pariente más cercano de Sir Charles y heredero universal de los bienes de los Baskerville, Sir Henry. ¿Debe él, el doctor Mortimer, recibir a Sir Henry como si nada extraño ocurriese, o debe de informarle de las extrañas circunstancias de la muerte de Sir Charles, o debe de persuadirlo para que no vaya a vivir a Baskerville Hall, pues el doctor Mortimer teme por la vida del recién llegado?

El detective le aconseja al doctor Mortimer que no le cuente a Sir Henry las circunstancias extrañas, y le pide que no lo deje solo mientras éste se encuentre en Londres ni durante el viaje a la mansión, y además envía al doctor Watson como acompañante de Sir Henry para que éste no deje solo al heredero durante los días en que él, el famoso detective, investigará desde Londres el asunto... Aunque Watson cree que Sherlock Holmes no le ha dado al caso la importancia que merece, pues ni siquiera los ha acompañado en el viaje, la verdad es que el detective se encuentra preocupado pues desde el inicio se ha dado cuenta de que en el asunto está inmiscuido un criminal de enorme inteligencia.

La novela se deja leer con rapidez pues es interesante, misteriosa, inteligente, está llena de secretos y está ambientada en una zona geográfica digna, precisamente, de una novela de terror. Para los fans de Sherlock Holmes la relectura de ésta y de cualesquiera de las otras tres novelas y de los 56 cuentos es siempre un placer. Quienes nunca hayan leído las mucho muy recomendables obras de Sherlock Holmes, esta novela es una muy buena opción para comenzar. Si cuentan con las obras completas a la mano sería preferible empezar con la primera novela, Un estudio en escarlata, pues es en esta obra en donde conocemos a los personajes, sin embargo si se trata de salir a buscar alguna de las obras de Sherlock Holmes (de las del canon, es decir de las escritas por Arthur Conan Doyle), pues sencillamente comiencen a leer el libro que consigan primero. Hay muchísimas ediciones de estas obras. Si leen en inglés les dejo aquí una liga en donde pueden encontrar las 60 obras de Sherlock Holmes, por separado o en un sólo archivo, como ustedes quieran, en formato e-pub, excelente para leer en computadora, en iPhone, en iPad, en smart phones, en tablets y en otros lectores digitales: http://sherlock-holm.es/epub/


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El sabueso de los Baskerville. Arthur Conan Doyle. Traducción de Ramiro Sánchez Sanz. Ediciones Altaya. Biblioteca de Aventura y Misterio. Con las ilustraciones de la edición original de 1902, de Sidney Paget. 222 págs.

Ilustración de la edición original por Sidney Paget


Ligas:

* El famoso "canon" de Sherlock Holmes se refiere a las 60 obras (56 cuentos y cuatro novelas) de este personaje escritas por su creador: Sir Arthur Conan Doyle. La lista de las 60 obras se encuentra aquí, en español y con su título original en inglés, y la fecha de publicación:
http://es.wikipedia.org/wiki/Canon_holmesiano

* Vale la pena también revisar la página en inglés, pues ahí viene un listado de las obras que se encuentran fuera del canon, es decir, las novelas, guiones de cine, televisión, radio y cómic escritos por otros autores, que han utilizado a los personajes de Conan Doyle:
http://en.wikipedia.org/wiki/Canon_of_Sherlock_Holmes


miércoles, 26 de septiembre de 2012

Entrevista a Adriana Grimaldo


Fotografía de Adriana Grimaldo,
cortesía de Mario Emiliano Fernández 


Ecos de la FILS 2012

Entrevista a Adriana Grimaldo

Jesús Guerra

Adriana Grimaldo nació en Monclova, Coahuila, y quizá porque es, como ella misma dice, «un poquito hiperactiva» su vida ha sido muy movida: cursó estudios de Filosofía en Pamplona, España, pero no acabó la carrera, en cambio sí se licenció en Administración de Empresas, carrera que estudió en Guadalajara. Luego regresó a Monclova, en donde comenzó a escribir la trilogía que ahora promueve. Va y viene. Los tres libros los ha escrito, lo dice con mucho orgullo, en la casa de sus papás, en Monclova. El más reciente apareció en abril de este año. Actualmente vive en Querétaro, y está a punto de comenzar a estudiar una maestría. Esta charla se llevó a cabo poco después de que sostuviera una plática con jóvenes durante la Feria Internacional del Libro Saltillo 2012.

Jesús Guerra: Platícame de qué se trata tu trilogía.
Adriana Grimaldo: Hace rato estuve en una presentación aquí, con jóvenes, y se me ocurrió decirles: «cuando vas a un restaurante y pides un platillo, preguntas qué ingredientes tiene y así te das una idea de a qué sabe», y se me ocurrió contarles algunas cosas para que se dieran una idea a qué les podían saber mis libros, hablándoles de los ingredientes. Uno de los ingredientes de mis libros es la filosofía. Yo estudié filosofía. Entonces, hago novelas en las cuales, a través de los diálogos o de las escenas develo contenido filosófico. Es decir, no te vas a leer nunca las letritas chiquitas de los filósofos, pero vas a entender la filosofía aplicada a situaciones reales y contemporáneas. En el primer libro utilizo la filosofía de Heráclito. Piensa en su frase «nadie se baña dos veces en las aguas del mismo río». Nadie tiene dos veces exactamente la misma oportunidad. Tenemos siempre miles, pero la misma exactamente sólo una vez. Lo que hago en el primer libro es recrear un no mundo, y ése sería otro de los ingredientes, si habláramos de una receta. Nunca vas a leer en mis libros «sucedió en Saltillo el día tal». Son atemporales, y el lugar me sirve a mí para utilizar la metáfora y hacer alusión a otro mensaje. En el caso particular del primer libro, que se llama Valles y alturas, el escenario en el que comienza la historia es un valle, que alude metafóricamente a la infancia de los personajes, y las alturas al punto en el que terminan los jóvenes de la historia. Y ése es otro ingrediente de mis libros: no menciono las edades, las doy a entender. Utilicé doce personajes en un no-mundo porque quiero enganchar al lector. Doce, un abanico de personalidades.

En el segundo libro, que se llama De noche, los ingredientes son: la filosofía de Parménides, que trata de encontrar la esencia de la vida y de la personalidad, y el reencuentro de cinco de los doce personajes de la primera historia, y después de que pasan un tiempo juntos viven únicamente de noche, un problema, una oscuridad, y si tú me lo preguntas yo les doy a estos chicos una edad de adolescentes.

Y en el último libro, que se llama Viento austral, sólo se encuentran dos personajes, ahora ya son adultos, y la historia se narra en una noche; la narración de esa noche contiene sus vivencias de los últimos años y en ambos coincide que sus vivencias están relacionadas con el miedo. Ambos han experimentado el miedo, de forma colectiva y de forma individual. La filosofía que se encuentra en este libro es la de Pitágoras en su antítesis de la unidad. El miedo. Este libro, que es el que estoy presentando actualmente, me parece sumamente actual. Obviamente no se acaba el mundo el 21 de diciembre, pero estamos viviendo momentos difíciles. El país está viviendo violencia, el mundo vive violencia, hay muchas supersticiones... Lo que busco en este libro es retratar estos escenarios, es un libro con muchas referencias históricas, hablo del comunismo, de Sri Lanka, de las Madres de la Plaza de Mayo en Argentina, de Pinochet y Chile, obviamente de lo que ha pasado en México, y lo que busco es atrapar al lector y que ubique que vive en una situación y que vivimos con miedo. Todas las noticias que escuchamos, ¿qué hacemos con ellas? Sólo dos personajes de los doce del principio supieron hallarle a la movida de cómo se vive con el miedo. Presento entonces a dos personajes sumamente valientes que enseñan cómo se afronta el miedo.




JG: ¿De qué extensión son tus novelas?
AG: Cuando las editamos, las pensamos para que en una lectura de dos horas acabaras estas historias, cada libro. Son de una extensión muy corta, oscilan entre las 140 y las 160 páginas. Pero en tiempo es eso, te sientas a leer el libro y te tardas dos horas más o menos en leerlo.

JG: ¿Son para lectores de qué edades?
AG: Quienes lo están leyendo están en tercero de secundaria o secundaria completa y preparatoria. Incluso las invitaciones que me están haciendo para platicar son con chavos de esas edades.

JG: ¿Por qué escribir novelas para jóvenes?
AG: Hay una relación curiosa... El primer libro lo escribí en unos meses en los que estuve intentando cosas y no salían, y estuve en Monclova en la casa de mis papás, y yo había estado muchos años sin convivir con mis sobrinos. El primer libro es una historia que escribí para mis sobrinos. Que les sirviera a ellos como una referencia para su vida, y ellos tienen esas edades. Y bueno, gracias a Dios ha llegado a muchos más lectores de esa edad. ¿Por qué escribo para jóvenes? Por la cercanía que tuve con mis sobrinos y luego me encantó la edad, porque los siento súperfrescos, y no sabes cómo disfruto, cuando hay alguna posibilidad de presentaciones, de ver sus miradas vivaces y anhelantes de un mensaje con esperanza. Ahora tengo tres novelas para jóvenes y no sé si vaya a seguir en esa línea pero ahorita con las presentaciones me encanta esa convivencia.

JG: ¿Son edición de autor o están hechos por una editorial independiente?
AG: Cuando saqué el primer libro hice los típicos treinta ejemplares, hechos para la familia y un amigo me sugirió mandarlo a escuelas. Yo mandé un sobre con el libro a un colegio de Torreón y lo leyeron en el área de literatura y me hablaron a la casa y me pidieron 200 ejemplares para cubrir su grado de secundaria y yo pensé «¡200 libros!» Lo que hice fue comenzar a buscar editoriales para ver si podían tomar mi libro para publicarlo, y las editoriales te piden más o menos un año en lo que hacen los dictámenes y hacen todo el proceso. Y yo les explicaba que para agosto los necesitaba y nada. Editorial Progreso, que es con la que tengo un libro de texto de Ética me explicó que si yo ya tenía una venta lo que yo tenía que hacer era editarlo, es decir pagar la edición, y luego pagar los derechos en Indautor, y venderlo. Y así fue como desde el primer libro lo hice así, sin editorial. Estos libros, desde el primero, se pagan solos su edición.





JG: Platícame esa experiencia de las lecturas en escuelas. ¿Qué está sucediendo con eso?
AG: Yo creo que soy un poco hiperactiva (ríe)... Empecé a hacer varias cosas. Una de ellas está enfocada a las escuelas que ya los leen: me invitan y hacemos una plática; pero también estoy haciendo círculos de lectura en Querétaro, donde vivo, en casas-hogares, en el reclusorio, el de menores, y entonces lo que estoy haciendo es que tomo mis libros y toco puertas y hago círculos de lectura. Y ahora estoy concretando conferencias ya directamente para jóvenes. Por otro lado, estoy buscando más instituciones educativas que abran las puertas, como en este encuentro de hoy, independientemente de que asistan chicos que aún no hayan leído estos libros.

JG: ¿Qué reacciones encuentras, por ejemplo con los círculos de lectura?
AG: Son muy diferentes... A mí me da la energía necesaria para seguir escribiendo y seguir en esto. Las reacciones en escuelas son para mí muy alentadoras porque les hace mucha ilusión conocer a quien escribió el libro y me doy cuenta de que se cumple la misión, se logra una reflexión por parte de los jóvenes. Ha habido de todo. Hace poco estuve en un colegio en Texcoco y yo lloraba, a la entrada del colegio había una manta con una foto que habían sacado de internet, y decía algo así como «Bienvenida la escritora...», y al entrar todos los chicos traían un gafete con las portaditas de los libros, y habían preparado sus preguntas, muy bien hechas, chicos que de veras entendieron los mensajes. ¡Qué bonita respuesta! Yo lo que te podría decir de todos los chicos con los que he estado hablando es que los jóvenes necesitan que les dejemos de dar malas noticias, y que los dejemos de asustar sobre que va a estar complicadísimo el mundo, que no van a encontrar trabajo... Los chicos necesitan que les hablemos del mundo real, que es difícil pero que es posible. Eso es lo que encuentro, hoy con los chavos aquí en Saltillo encontré ojos anhelantes de buenas noticias y con una empatía padrísima.


Foto cortesía de Mario E. Fernández


JG: ¿Qué otras reacciones has encontrado, en términos de venta o de número de lectores?
AG: Te voy a contar algo que me tiene muy contenta. Luego uno toca muchas puertas y algunas se abren, ¿no? Un amigo me dijo que él conocía un distribuidor de libros en el Estado de México, que le diera mis libros para intentar algo con ellos. Era marzo, que es una temporada muerta para venta de libros en escuelas, y el distribuidor compró mil libros, y luego yo en agosto entregué otros mil libros en escuelas. La verdad, cada vez es mucho menor mi esfuerzo a la hora de las ventas, y esto está padre porque cada vez se está sumando más gente que distribuye libros, o se van pasando la voz de escuela a escuela... Dicen que los negocios son como los hijos, ¿no?, estos libros ya no son bebés, ya son como adolescentes y ya empiezan a darme algo muy concreto incluso en utilidades económicas.

JG: ¿Cómo definirías tus libros?
AG: En dos palabras: novelas metafóricas. Incluso los escenarios en que se desenvuelven los personajes son metafóricos. Juego con los tiempos y con los climas incluso. Por ejemplo, el último se recrea en «el verano de una bahía». Es decir, en la plenitud de la edad adulta de los dos personajes.

JG: Hay autores que dicen que sus novelas no tienen mensajes, o que son ambiguos, y hay otros que sí tienen mensajes, algunos específicos, otros demasiado específicos...
AG: Tendenciosos, ¿no?
JG: Sí. En este caso, ¿cuál es tu posición al respecto?
AG: Yo no tengo esa pretensión, lo que sí considero es que mi libro podría llegar a provocar una reflexión. Sin embargo, con todo respeto hacia el público o hacia la literatura que enseña métodos existenciales como recetas de haz A más B y obtienes D, yo definitivamente no postulo esa bandera. Los míos, desde la filosofía, son libros que proponen la reflexión y estoy en el entendido de que lo que a ti te funciona en tu vida no me va a funcionar a mí en particular, ¿no?, pero que a lo mejor ambos podemos desarrollar una reflexión para llegar al mismo punto. Lo que buscan estos libros, más que dar un mensaje específico, es provocar una reflexión, o un análisis del tema del que trata el libro, por ejemplo en el último, acerca del miedo.

JG: ¿Qué es lo que tú lees?
AG: Soy muy abierta con respecto a la lectura pero normalmente leo so pretexto de. Hace poco estuve releyendo Los miserables, pero porque de ahí voy a sacar material para dar una conferencia. Estoy leyendo mucho y muy diverso pero por objetivos. Hace poco leí El ruido de las cosas al caer, de Juan Gabriel Vásquez, que ganó el Premio Alfaguara el año pasado, buenísimo, interesantísimo, porque es la primera vez que yo ubico a un escritor, hombre, hablando del sentimiento masculino, y es un libro con muchas referencias históricas; muy interesante. Estoy leyendo de todo pero sé porqué lo leo; estoy enfocada en algo y leo lo que tiene que ver con eso.

JG: ¿Cuáles han sido tus obras o tus autores favoritos?
AG: Es chistoso, porque ni siquiera es la escritora que más admiro, pero me pasó algo con Isabel Allende. Cuando estaba acabando la prepa me encargaron leer su libro Hija de la fortuna; yo cerré ese libro y me dije «quiero conocer el mundo». Es uno de esos libros inspiradores, aunque tal vez si lo leyera ahora ya no haría eso, pero lo leí justo en el momento adecuado, y te digo, no es mi escritora favorita simplemente ha llegado... Después de un tiempo, justo cuando empezaba yo a escribir, leí otro de sus libros, que se llama La suma de los días, otra vez completamente inspiracional, porque me hizo entender que lo mío eran los libros. Y hace poquito releí Paula, su libro sobre la muerte de su hija, y me hizo que volviera a pensar en que hay que tener un rumbo en la vida, porque se nos va a ir. Su hija murió de 28 años. Te repito, no es mi escritora favorita pero casualmente me he topado con sus libros en momentos muy específicos de mi vida.

miércoles, 12 de septiembre de 2012

La Casa de la Seda, de Anthony Horowitz






La casa de la seda,
de Anthony Horowitz

Jesús Guerra

Ha pasado un año desde la muerte de Sherlock Holmes. El doctor Watson, luego de «dos matrimonios, tres hijos, siete nietos, una carrera de éxito en el mundo de la medicina y la orden del mérito que me entregó su majestad Eduardo VII en 1908», viejo y enfermo, se encuentra en un una casa de reposo atendido por enfermeras, pero toma la pluma de nuevo para confiar al papel «Las aventuras de El hombre de la gorra y La Casa de la Seda» que «fueron de alguna manera las más asombrosas de la carrera de Sherlock Holmes, pero en aquel momento fue imposible relatarlas, por razones que serán suficientemente evidentes».

En esta nostálgica e informativa introducción, Watson comenta que en el continente hay una guerra «terrible y sin sentido», podemos suponer que se refiere a la Primera Guerra Mundial, misma que se desarrolló, como sabemos, de julio de 1914 a noviembre de 1918. Pongamos pues que escribe en 1915 estos casos inseparables que sucedieron en Londres en 1890. Escribe, pues, un cuarto de siglo después de los acontecimientos. «Era imposible antes... y no me estoy refiriendo sólo a la conocida aversión de Holmes a la publicidad. No. Los sucesos que voy a relatar eran francamente demasiado escandalosos para ser publicados. Todavía lo son. No exagero cuando digo que destrozarían el tejido completo de la sociedad y, sobre todo en tiempos de guerra, es un riesgo que no me puedo permitir».

Pero eso no es suficiente, Watson dice que al terminar el manuscrito lo enviará a las cámaras de Cox & Co., en Charing Cross, y que dará instrucciones para que el paquete no se abra en los próximos cien años. Y apunta: «Es imposible imaginar cómo será el mundo entonces, qué avances habrá hecho la humanidad, pero quizás los futuros lectores estarán más habituados al escándalo y a la corrupción que lo que los míos puedan llegar a estarlo».

Así es, casi cien años después —y no sé por qué el libro se publica antes de los cien años pero me parece maravilloso—, los lectores, en efecto y por desgracia, estamos más habituados al escándalo y a la corrupción. Así, el viejo Watson, a quien sus hijas visitan de vez en cuando y hasta le llevan a sus nietos, toma la pluma y 25 años después de los casos, se da a la tarea de escribirlos, de la mano del escritor británico Anthony Horowitz, y nos cuenta estas aventuras que han aparecido publicitadas como «la nueva novela de Sherlock Holmes».

La verdad es que hay muchas novelas y cuentos que una gran variedad de escritores de misterio han escrito a lo largo del tiempo, tomando prestados los personajes creados por sir Arthur Conan Doyle. La gran mayoría no son reconocidos como «obras válidas» por parte del Conan Doyle Estate, sin embargo sí han reconocido algunas (ver aquí mismo el comentario a la novela de Sherlock Holmes escrita por Caleb Carr), sin embargo alguna diferencia existe. He leído que porque esta novela fue no sólo admitida sino solicitada por los herederos de la obra de Conan Doyle. En todo caso, La Casa de la Seda cuenta con la aprobación oficial, por decirlo de alguna manera. Hay que recordar que la obra oficial, el Canon, está compuesto por 60 obras: 56 relatos y cuatro novelas, todas escritas por sir Arthur Conan Doyle, el creador de este detective tan querido aún por los lectores, Sherlock Holmes, y de su asistente y narrador de sus aventuras, el doctor John Watson.  

En diciembre de 1890, debido a que su mujer sale de la ciudad, el doctor Watson va a pasar unos días a la casa de asistencias en donde vive Sherlock Holmes, en el 221B de Baker Street, en donde él mismo vivió. Watson, aunque felizmente casado, añora las aventuras que vivía con su amigo. Tan pronto llega Watson, llega un cliente a solicitar la ayuda del señor Holmes. Es un marchante de arte que narra una compleja aventura suya luego de la venta de unos cuadros a un caballero norteamericano, y ahora está seguro de que lo sigue un criminal estadounidense y teme por su seguridad. Holmes y Watson se ponen a trabajar de inmediato y cuando todo parece indicar que se ha resuelto el caso, éste se complica mezclándose con otro. Debido a las características de la novela, no puedo comentar gran cosa del argumento, lo que puedo es decir que la obra no tiene desperdicio, ni momentos muertos, ni cabos sueltos, y que es sumamente entretenida, con un argumento complejo y un misterio muy enredado pero, al final de la obra, perfectamente comprensible. Para los lectores (a los que gustamos de las obras de Sherlock Holmes aunque no seamos unos expertos), al igual que para Watson, se trata de una obra muy nostálgica: nos devuelve momentáneamente a 221B de Baker Street y a todos los personajes habituales. El prefacio, como ya mencioné, y el epílogo son muy emotivos, y la obra en general es sumamente satisfactoria.

Anthony Horowitz (nacido en 1955) es un escritor muy prolífico que ha escrito una enorme cantidad de libros para niños y para jóvenes, y algunas novelas de misterio para adultos. Además, escribe mucho para la televisión inglesa y ha escrito algunos guiones de cine. De hecho, la segunda película de Tintin (The Adventures of Tintin: Prisoners of the Sun) tendrá guión suyo.

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La Casa de la Seda. Anthony Horowitz. Suma de Letras. Madrid, 2011. 392 págs. 

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The House of Silk. Anthony Horowitz. Mulholland Books /  Little, Brown and Company. International Mass Market Edition, mayo de 2012. 340 págs.

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Enlaces:
* El comentario en este blog de El secretario italiano, de Caleb Carr (también una novela de Sherlock Holmes):

* Sobre Anthony Horowitz (en inglés):

(en español):

* Si quieres bajar las primeras páginas de La Casa de la Seda en PDF, o leerlas en línea:

* Una reseña de un libro infantil de Anthony Horowitz, La granja Groosham, en el blog Tan-Tan:

sábado, 8 de septiembre de 2012

Ciencia Ficción las 100 mejores novelas, de David Pringle





Ciencia Ficción las 100 mejores novelas
de David Pringle

Jesús Guerra

Estamos a unos cuantos días del inicio de la Feria del Libro Saltillo 2012, por eso me parece particularmente útil comentar un libro que trata sobre libros, específicamente de libros de ciencia-ficción. Así, podrán buscar tanto este libro en particular como cualquiera de los cien libros que enlista y comenta el autor del libro, David Pringle. Es importante anotar que aunque el título castellano en portada es sólo Ciencia Ficción las 100 mejores novelas, el título aparece con el subtítulo del original en la portadilla del volumen, el cual aclara el idioma de las obras seleccionadas y los años tomados en cuenta: «Una selección en lengua inglesa, 1949-1984».

¿Por qué estos 35 años? La razón es sencilla: el libro enlista sólo novelas aparecidas en formato de libro, y 1949 es el año en que, de manera formal, las grandes editoriales norteamericanas «reconocen», por decirlo así, a la ciencia-ficción y comienzan a editarla. Hasta ese momento la CF era un género que se refugiaba sólo en revistas. Y el año de terminación es el año en que el autor del libro comenzó a trabajar en el libro, el cual fue publicado en inglés en 1985. En Barcelona apareció cinco años después, 1990, en la editorial Minotauro, y la primera edición mexicana se publicó en diciembre de 1991.




En el prólogo del libro el autor explica la definición de Ciencia-Ficción que utilizó para la selección de los títulos, los motivos para incluir algunas novelas y excluir otras, etcétera. Como toda selección (ya sea un listado comentado como éste, o una antología de lo que sea), no le da gusto a todo el mundo. Eso es imposible. Toda selección, por objetiva que pretenda serlo, es siempre subjetiva. Aun así, este libro es famoso  y es útil, y se deja leer en el orden que el lector quiera; más aún, es un libro que hay que tener a mano porque es siempre una referencia importante. Es un libro de consulta para los amantes del género, tanto para los especialistas como para quienes comienzan a leer obras de CF y quieren tener una guía.

Para cada uno de los títulos, David Pringle escribió un pequeño ensayo, de aproximadamente dos páginas, muy bien documentados.

A continuación se encuentra la lista de las cien novelas incluidas, en el orden en que se encuentran en el libro (que es cronológico, de acuerdo a la aparición de cada novela en forma de libro en el mercado de lengua inglesa). El libro incluye datos de las ediciones en español.

1. 1984, George Orwell [1949]
2. La Tierra permanece, George R. Stewart [1949]
3. Crónicas marcianas, Ray Bradbury [1950]
4. Amos de títeres, Robert A. Heinlein [1951]
5. El día de los trífidos, John Wyndham [1951]
6. Limbo, Bernard Wolfe [1952]
7. El hombre demolido, Alfred Bester [1953]
8. Fahrenheit 451, Ray Bradbury [1953]
9. El fin de la infancia, Arthur C. Clarke [1953]
10. Los hombres paradójicos, Charles L. Harness [1953]
11. Lo que el tiempo se llevó, Ward Moore [1953]
12. Mercaderes del espacio, F. Pohl y C. M. Kornbluth [1953]
13. Un anillo alrededor del Sol, Clifford D. Simak [1953]
14. Más que humano, Theodore Sturgeon [1953]
15. Mission of Gravity, Hal Clement [1954]
16. A Mirror for Observers, Edgar Pangborn [1954]

17. El fin de la eternidad, Isaac Asimov [1955]
18. The Long Tomorrow, Leigh Brackett [1955]
19. Los herederos, William Golding [1955]
20. Las estrellas, mi destino, Alfred Bester [1956]
21. La muerte de la hierba, John Christopher [1956]
22. La ciudad y las estrellas, Arthur C. Clarke [1956]
23. Puerta al verano, Robert A. Heinlein [1957]
24. Los cuclillos de Midwich, John Wyndham [1957]

25. La nave estelar, Brian W. Aldiss [1958]
26. Un caso de conciencia, James Blish [1958]
27. Have Space-Suit - Will Travel, Robert A. Heinlein [1958]
28. Tiempo desarticulado, Philip K. Dick [1959]
29. Ay, Babilonia, Pat Frank [1959]
30. Cántico a San Leibowitz, Walter M. Miller [1959]
31. Las sirenas de Titán, Kurt Vonnegut [1959]
32. Rogue Moon, Algis Budrys [1960]
33. Venus más X, Theodore Sturgeon [1960]
34. Invernáculo, Brian W. Aldiss [1962]
35. El mundo sumergido, J. G. Ballard [1962]
36. La naranja mecánica, Anthony Burgess [1962]
37. El hombre en el castillo, Philip K. Dick [1962]
38. Los viajes de Joenes, Robert Sheckley [1963]
39. Estación de tránsito, Clifford D. Simak [1963]
40. Cuna de gato, Kurt Vonnegut [1963]
41. Barbagris, Brian W. Aldiss [1964]
42. Expreso Nova, William S. Burroughs [1964]
43. Tiempo de Marte, Philip K. Dick [1964]
44. Los tres estigmas de Palmer Eldritch, Philip K. Dick [1964]
45. El planeta errante, Fritz Leiber [1964]
46. Norstrilia, Cordwainer Smith [1964]
47. El doctor Moneda Sangrienta, Philip K. Dick [1965]
48. Duna, Frank Herbert [1965]
49. El mundo de cristal, J. G. Ballard [1966]
50. ¡Hagan sitio! ¡Hagan sitio!, Harry Harrison [1966]
51. Flores para Algernon, Daniel Keyes [1966]
52. The Dream Master, Roger Zelasny [1966]
53. Todos sobre Zanzíbar, John Brunner [1966]
54. Nova, Samuel R. Delany [1968]
55. ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?, Philip K. Dick [1968]
56. Campo de concentración, Thomas M. Disch [1968]
57. El programa final, Michael Moorcock [1968]
58. Pavana, Keith Roberts [1968]
59. Héroes y villanos, Angela Carter [1969]
60. La mano izquierda de la oscuridad, Ursula K. Le Guin [1969]
61. El palacio de la eternidad, Bob Shaw [1969]
62. Incordie a Jack Barron, Norman Spinrad [1969]
63. Tau Zero, Poul Anderson [1970]
64. Regreso a Belzagor, Robert Silverberg [1970]
65. El año del sol tranquilo, Wilson Tucker [1970]
66. 334, Thomas M. Disch [1972]
67. La quinta cabeza de Cerbero, Gene Wolfe [1972]
68. The Dancers at the End of Time, Michael Moorcock [1972-1976]
69. Crash, J. G. Ballard [1973]
70. Looking Backward, From the Year 2000, Mack Reynolds [1973]
71. Empotrados, Ian Watson [1973]
72. Caminando hacia el fin del mundo, Susy McKee Charnas [1974]
73. The Centauri Device, M. John Harrison [1974]
74. Los desposeídos, Ursula K. Le Guin [1974]
75. El mundo invertido, Christopher Priest [1974]
76. Rascacielos, J. G. Ballard [1975]
77. Galaxies, Barry N. Malzberg [1975]
78. El hombre hembra, Joanna Russ [1975]
79. Orbitsville, Bob Shaw [1975]
80. The Alteration, Kingsley Amis [1976]
81. Woman on the Edge of Time, Marge Piercy [1976]
82. Homo plus, Frederik Pohl [1976]
83. Michaelmas, Algis Budrys [1977]
84. Y mañana serán clones, John Varley [1977]
85. Visitantes milagrosos, Ian Watson [1978]
86. El verano del pequeño San John, John Crowley [1979]
87. On Wings of Song, Thomas M. Disch [1979]
88. La sombra errante, Brian Stableford [1979]
89. Juniper Time, Kate Wilhelm [1979]
90. Cronopaisaje, Gregory Benford [1980]
91. The Dreaming Dragons, Damien Broderick [1980]
92. Wild Seed, Octavia E. Butler [1980]
93. Riddley Walker, Russell Hoban [1980]
94. Roderick y Roderick at Random, John Sladek [1980-1983]
95. El Libro del Sol Nuevo, Gene Wolfe [1980-1983]
96. The Unreasoning Mask, Philip José Farmer [1981]
97. Juramento de fidelidad, Larry Niven & Jerry Pournelle [1981]
98. Sólo un enemigo: el tiempo, Michael Bishop [1982]
99. The Birth of the People’s Republic of Antarctica, John Calvin Batchelor [1983]
100. Neuromante, William Gibson [1984]

Ahora bien, el libro apareció hace 27 años. Era necesaria una continuación, y tal continuación se publicó ya en inglés: Science Fiction the 101 Best Novels 1985-2010, de Damien Broderick y Paul di Filippo, con un prólogo del propio David Pringle.



Esta continuación yo no la tengo, pero les doy dos ligas a los interesados. Primero, un muy buen comentario de ambos libros, que se puede leer aquí:

La segunda liga complementa a la perfección la anterior pues contiene la lista de los 101 libros seleccionados y comentados en el segundo libro:

Y además agrego aquí una liga para que puedan leer en línea el libro comentado en esta columna, Ciencia Ficción las 100 mejores novelas, de David Pringle:

Espero que este libro les guste, y que el presente comentario les ayude en su búsqueda de las «201 mejores novelas de ciencia-ficción, de 1949 a 2010».

. . . . . . . . . . . . . . .

Ciencia Ficción las 100 mejores novelas. David Pringle. Traducción de Manuel Figueroa. Editorial Minotauro. México, 1991. 226 págs.

jueves, 6 de septiembre de 2012

La Feria del Libro Saltillo 2012





La Feria del Libro Saltillo 2012

La fiesta de las letras número 15 se llevará a cabo del viernes 14 al domingo 23 de septiembre. Ha cambiado de sede, ahora se desarrollará en el Centro Cultural de la Ciudad Universitaria de la UA de C, en Arteaga, y por supuesto los esperamos a todos.

En la FILS 2012 el país invitado es Cuba y el estado invitado es Hidalgo. Estarán representados 370 fondos editoriales en 190 stands. Se ofrecerán dos cátedras (la Cátedra de Cultura Latinoamericana Alejo Carpentier y la Cátedra de Lectura Armando Sánchez Quintanilla), un congreso de lectura, dos seminarios (uno de arte y filosofía y otro de migración y derechos humanos); habrá cinco pabellones (el de Cuba, el de Hidalgo, el de la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro, el del Archivo Municipal de Saltillo y el de Grupos Vulnerables); se dictarán conferencias sobre poesía, música y literatura, historia, desarrollo personal, filosofía, literatura cubana, apiterapia, narrativa mexicana y sobre el centenario de la muerte de Bram Stoker (el autor de la novela Drácula). Habrá mesas de discusión sobre narrativa norteña, poesía y cómics. Se desarrollarán tres homenajes, a Daniel Sada, a Carlos Fuentes y a Wislawa Szymborska.

En la decimoquinta FILS se llevarán a cabo 680 sesiones de talleres infantiles, 45 sesiones de cuentacuentos, 10 espectáculos para niños, talleres para jóvenes y adultos (de novela, poesía, cuento, guión de cine, narración oral, y de capacitación a talleristas). Para jóvenes hay un taller de rol Manga, y hasta un concurso de Cosplay. Habrá también conciertos de diversos tipos de música, lecturas literarias teatralizadas (con Cecilia Toussaint, Astrid Hadad y Rodrigo Murray), cuatro obras de teatro y ocho lecturas de poesía, y alrededor de 120 presentaciones de libros de autores extranjeros, nacionales y estatales.

Por supuesto, la FILS 2012 contará con la presencia de un gran número de autores. Revisen el programa completo y ven las fechas y los horarios de sus eventos preferidos. Lo pueden consultar aquí: http://www.filsaltillo.org/