jueves, 23 de enero de 2014

La elegancia del erizo, de Muriel Barbery




La elegancia del erizo
(o el placer de buscar los siempres en los jamases)

Maru Galindo

La primera vez que vi esta novela en una librería me pareció que era una lectura para adolescentes, puesto que la portada presenta una chica con gafas y al fondo la torre Eiffel con suelo rosa y un cielo con nubes. Sí, imaginé una novela rosa, lo cual no se me antojó, ni siquiera leí el texto de contraportada así que pasé de ella. Poco tiempo después, un grupo entusiasta y ávido de lectura me la recomendó; esta vez sí fui más allá de la portada y me encontré un tesoro, una obra redonda que sin grandes pretensiones literarias te embelesa y atrapa. Escritura original en francés, una traducción española de la editorial Seix Barral, algo de slang francés, filosofía y una buena historia que leer.
 
Edición francesa
Les adelanto que existe una película que llegó a nuestro país en 2009 a través de una muestra de cine francés que no fue difundida lo suficiente. Yo primero vi la película, la cual me encantó, y después leí el libro. La novela fue adaptada al cine en 2008 bajo el título Le Hérisson («El erizo»). Ambas obras son literaria y estéticamente buenas.

El libro fue escrito Muriel Barbery y editado en Francia por Gallimard en 2006, y es la segunda novela de Barbery, con la cual alcanzó cifras extraordinarias de ventas, algo así como un millón de copias, por lo que le otorgaron el premio francés de las librerías. Considero que la novela es un homenaje al director de cine japonés Yasujiro Ozu (1903-1963), a los dibujos animados, a la literatura, al arte y a los nómadas.
 
Edición francesa
de bolsillo
La obra cinematográfica de Ozu se caracteriza por tener planos largos y fijos, filmados a noventa centímetros del suelo, pues él consideraba el punto de vista que tendría un adulto sentado sobre un tatami. Retrató en sus películas los grandes cambios que sufrió la sociedad japonesa después de la Segunda Guerra Mundial: la pérdida de los valores tradicionales de su país y la desintegración familiar, podríamos decir que era un director costumbrista.

A través de una particular forma de escribir —capítulos cortos con títulos atractivos— es como se desarrolla esta historia, que como cuentas de un collar de perlas Akoya nos introduce al mundo del número 7 de la calle Grenelle, un inmueble burgués en París, donde nada es lo que parece, y bulle en ese edificio a través de sus personajes la crítica al sistema político y social francés. Pero no todos los personajes que habitan el número 7 son comunes, ahí existen tres que nos harán vibrar de emoción al responder a un asunto trascendental para el ser humano. Ellos son: Paloma, Renée y Kakuro.

«¿Qué ha sido de nuestros sueños de juventud? Preguntan con aire desencantado y satisfecho. Se han desvanecido, y cuán perra es la vida…» (p. 17).

«En lo que a mí respecta, tengo doce años, vivo en la calle Grenelle, número 7, en un piso de ricos. Mis padres son ricos, mi familia es rica y por consiguiente mi hermana y yo somos virtualmente ricas» (p. 18).
 
Edición en inglés
Dos de estos personajes esconden un secreto. Paloma, hija del matrimonio Josse, posee una inteligencia fuera de lo común que desquicia a su familia. Ella decidió quitarse la vida en su próximo cumpleaños. Renée, la portera, lleva mucho tiempo fingiendo ser una mujer común, proviene del campo, es viuda y tiene un gato que se llama León, en honor al escritor ruso Tolstoi.

«Me llamo Renée. Tengo cincuenta y cuatro años. Desde hace veintisiete soy la portera del número 7 de la calle Grenelle, un bonito palacete con patio y jardín interiores, dividido en ocho pisos de lujo, todos habitados y todos gigantescos» (p. 13).
Otra edición en inglés

Dice Barbery de Renée: «Deseé crear un personaje en el que cupiese el desarraigo y la soledad más absoluta y que al mismo tiempo tuviese la capacidad de tener un amplio conocimiento de la vida y fuese una sabia». Por ello la portera esconde esa belleza que sólo otras personas iguales pueden ver: sabe de música, de gramática, de filosofía y aprecia el arte y los libros. «Nunca vemos más allá de nuestras certezas y, lo que es más grave todavía, hemos renunciado a conocer a la gente…» (p. 159). Detrás de esa mujer adusta hay una persona refinada, sensible y amorosa. «La señora Michel tiene la elegancia del erizo: por fuera está cubierta de púas, una verdadera fortaleza, pero intuyo que, por dentro, tiene el mismo refinamiento sencillo de los erizos…» (p. 157).

Y con respecto al señor Kakuro Ozu, el nuevo inquilino del edificio, representa al personaje oriental por tradición, «es un señor de unos sesenta años, muy presentable y muy japonés. Es más bien bajito, delgado con un rostro lleno de arrugas pero de expresión clara» (p. 145). Todos los residentes del edificio están muy intrigados por la llegada del señor Ozu, el extranjero que derrumba paredes y construye un nuevo mundo, rodeado de arte.
Edición en alemán

Paloma, Renée y Ozu forman un triángulo narrativo que nos enseñará a observar la vida de otra manera. Estos personajes, de una manera suave, empiezan a conocerse; ellos sí se ven y se encuentran como espejos que reflejan soledad y cierta tristeza que debe ser curada. «La camelia sobre el musgo del templo, el violeta de los montes de Kyoto, una taza de porcelana azul, esta eclosión de la belleza en el corazón mismo de las pasiones efímeras, ¿no es acaso a lo que todos aspiramos? ¿Y lo que nosotros, civilizaciones occidentales, no sabemos alcanzar? La contemplación de la eternidad en el movimiento mismo de la vida» (p. 159).

¿Te animas a leerla? Con seguridad te digo que encontrarás en esta novela tu vida, como una exquisita perla cultivada.

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La elegancia del erizo. Muriel Barbery. Seis Barral. Colección Formentor. 368 págs.

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Ficha de la película:
El erizo (Le hérisson). Dirección: Mona Achache. Guión: Mona Achache y Muriel Barbery, basado en la novela de Barbery. Fotografía: Patrick Blossier. Edición: Julia Gregory. Con: Josiane Balasko, Garance Le Guillermic, Togo Igawa, Anne Brochet y Ariane Ascaride, entre otros. 100 minutos.




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