sábado, 27 de agosto de 2011

Qué raros son los hombres, de José Ovejero




Qué raros son los hombres,
de José Ovejero

Jesús Guerra

Este libro reúne 10 cuentos, o más bien 10 relatos, estupendamente escritos que revelan un aspecto extraño, pero no fantástico, de la realidad. Un ángulo nebuloso, siniestro, oscuro, patético o simplemente triste de los acontecimientos cotidianos. En “Los conquistadores”, un periodista español que viaja a Cuba, con la intención de visitar los ahora míticos lugares de la sierra en donde estuvieron los revolucionarios de Castro para escribir un reportaje sobre un guerrillero olvidado por todos, encuentra el verdadero rostro de la isla, y a su pesar se enamora de una cubana, en circunstancias muy poco alentadoras para el amor.

En “El peso de las horas”, una mujer sufre, y desea, las llamadas obscenas de un desconocido. “Gogomóvil” nos cuenta, con una nostalgia controlada, la historia del primer coche de una familia española a principios de los años 60. Las aventuras sexuales, más bien tristes, de un estudiante español que vive en Berlín, y aprende a través de ellas algunas cosas sobre sí mismo son narradas en “Qué más da”.

El relato que le da título al libro nos cuenta un episodio extraño y más bien deprimente para el personaje central, Marta, una divorciada de 43 años que trata de reencontrar el camino de la soltería feliz. “Aún estoy en Berlín. Y me estoy muriendo de miedo” retrata el momento del desplome de un hombre que viaja a Alemania a encontrarse con su mujer para arreglar los asuntos pendientes de su divorcio.

“El premio”, con una enorme capacidad de síntesis y un amargo sentido del humor, nos relata el intento de un hombre por vengarse del ex amante de su esposa, utilizando su poder en un certamen literario. “Las penas del infierno” es un recuento de las tristezas de los matrimonios rutinarios, y de algunos escapes perversos que se pueden encontrar. “Stripper” relata un encuentro casi surrealista, finalmente patético, entre unos fanáticos del futbol y una desnudista masoquista en un bar, momentos antes de un partido. 



Y, finalmente, el relato más extenso del libro, "Los años en Venusberg", nos cuenta el encuentro e inicio de relación entre una ejecutiva y un pintor fracasado, ambos españoles y en España, cuyo punto en común es que ambos vivieron, de chicos, en el mismo barrio de Bonn, en Alemania.

Todos estos relatos nos muestran una faceta de la realidad: el fracaso, en diversos niveles, pero los efectos son diferentes en el lector: el asco, la risa, la sonrisa, la sorpresa, la tristeza; podemos compadecer, querer o detestar a los personajes, pero siempre los entendemos, gracias al talento del autor, quien nos obliga a reconocernos. Muy recomendable.

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Qué raros son los hombres. José Ovejero. Ediciones B, colección Ficcionario. Barcelona, 2000. 231 págs.

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Hay una nueva edición, de muy buen precio, para Kindle, en español (tanto para los lectores Kindle autónomos como para las versiones de Kindle para PC, para iPad, para iPod touch y para iPhone):

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El autor
José Ovejero nació en Madrid en 1958. Es licenciado en Geografía e Historia. Ha vivido varios años en Alemania y vive en la actualidad en Madrid y Bruselas. Ha publicado artículos y relatos en diarios y revistas de diversas partes del mundo. Entre sus libros se encuentran: Cuentos para salvarnos todos (1996); Bruselas (1996); Añoranza del héroe (1997); China para hipocondríacos (1998), Huir de Palermo (1999), Un mal año para Miki (2003), y Mujeres que viajan solas, entre otros. Hay nuevas ediciones de una buena parte de sus libros, incluidas ediciones electrónicas.

Su sitio de internet es: http://www.ovejero.info


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