viernes, 16 de septiembre de 2011

Imaginación y belleza



FIL-Saltillo 2011



Imaginación y belleza

Alejandro Beltrán

La cita fue en la sala Alejo Carpentier en punto de las cinco de la tarde del martes 13 de septiembre, para la presentación del libro Imaginación y belleza, del pintor autodidacta Mauro Martínez. Las palabras iniciales estuvieron a cargo de José Mena Soto, quien dijo estar identificado con varias de las obras. «La obra tiene muchas lecturas, imágenes abstractas que se acoplan, forman y transmiten sentimientos», expresó Mena. También dijo estar satisfecho y contento por la oportunidad que tuvo de presentar el libro. Aunque su texto fue relativamente breve, tuvo muchos aciertos en cuanto a lo que el autor quería transmitir.

«La obra El baile del diablo estremece por las simetrías llenas de maldad. Cada uno encuentra a su demonio», dijo. Terminó su presentación aplaudiendo la labor del artista y comentó que don Mauro era un buscador de imágenes cotidianas.

En la sala hubo muchos jóvenes que, atentos, se dieron cuenta de la sencillez con la que el artista habló de su obra. Don Mauro Martínez platicó sobre su vida privada. El salón se llenó de silencio cuando comentó su trabajo. Comenzó a principios del año 2006, tras la muerte de su hija. Las obras estaban llenas de color y, según la interpretación de José Mena, era la felicidad de su hija por haber tenido una familia como la que tuvo.

El artista dijo que el arte, el hecho de dibujar y pintar, le ayudó a superar los obstáculos. «Todos debemos practicar un arte. El que sirva para cantar que cante. Para algo servimos en esta vida, y si ese algo es el arte pues tenemos que entrarle», finalizó. Y tiene razón. «El arte», como dice Alejandro Jodorowsky, «tiene que servir para sanar».

Cuando terminó la presentación, se abrió un espacio para disipar dudas o escuchar comentarios. De entre los presentes se levantó un joven que, rojo por la vergüenza, se acercó al artista para mostrarle su dibujo. Mauro Martínez le dijo que su dibujo era muy bueno y cerró diciendo que el arte es un magnífico complemento de la vida.


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